sábado, 20 de septiembre de 2008

Inmersión


Cuando llevas mucho tiempo buceando vas conociendo a la gente que baja contigo un día, una temporada o años.... su comportamiento, sus reacciones, el consumo de aire, su forma de moverse... pero llega un día y de repente te dan el mayor susto de tu vida y sí, aún me pongo de mala hostia sólo al recordarlo.
Un inmersión con la mar movida, tirándo nordeste que en el fondo apenas se percibe pero con poca visibilidad...todo bien hasta trascurridos unos 50 minutos y de repente uno de los buceadores desaparece de mi vista...subo un poco girandome para ver sus burbujas y nada, toco la bocina un montón de veces y nada...comienzo la busqueda en redondo, subiendo y bajando y con la bocina a punto de reventar y nada... pienso que si sigue las reglas debería haber subido a superficie y decido dar por terminada la inmersión y subir con el resto...una vez arriba las olas no me dejan ver casi nada y aviso al barco para ver si lo divisan y nada...
Mis nervios están a punto de estallar...no aparece, sé que le queda aire aún en la botella y eso me tranquiliza un poco, sigo a merced de las olas esperándo verlo emerger cuando de repente me gritan del barco que ha salido ya, aunque algo lejos, al menos está fuera y se acerca despacio y compruebo que está bien pero con otro susto tambien...intentó buscarnos y se alejó más del grupo, me dice" si te escuchaba la bocina pero no distinguía de donde venia el sonido"
Sólo espero que esto no vuelva a ocurrir y que el chico siga buceando como hasta ahora... y no estaría de más llevar un cabo con varios mosquetones para sujetar al grupo en un momento dado de mala mar

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